1.000 millones de sanción por mostrar resultados médicos personales
¿Se endurece la protección de datos?
Google podría ser sancionado por la Unión Europea por rastrear el contenido de Gmail con el objetivo de ofrecer resultados médicos personalizados y por incluir en sus búsquedas resultados médicos personales y confidenciales. Google, por su parte, ya ha asegurado que desde el pasado 26 de junio Gmail ha dejado de rastrear información personal. Además está retirando de los resultados de búsqueda la información médica sensible. Eso sí, se seguirán monitorizando los e-mails para evitar los correos basura y las suplantaciones de correo.
Esta noticia, que publicó la Vanguardia el pasado 27 de junio, demuestra que cada vez más se controla de forma más exhaustiva el correcto uso de los datos personales. Sobre todo la información sensible como informes médicos.
Cuidado con las webs, Intranets, listas de correos electrónicos y servidores de pruebas. Existen empresas especializadas en la creación de software que mantiene los niveles de seguridad adecuados para los datos relacionados con la salud. Pero esto ya lo sabemos.
Y a pesar de ello, a veces pasamos por alto otros momentos dónde la confidencialidad es absolutamente ignorada.
¿Qué pasa si recibimos en nuestra casa una carta con el sello de un psiquiatra?
¿O si gritan nuestro nombre en una consulta médica sobre ETS?
Hacer sentir bien al paciente no sólo es mantener la confidencialidad de datos estipulada por la ley. También es entender que hay situaciones en las que el paciente prefería mantener su anonimato o, como mínimo, preservar al máximo su intimidad y los motivos de su consulta.